Cuando se empezó a construir el Park Güell en 1900, Barcelona no era como se conoce hoy en día, era una metrópolis cosmopolita y moderna, cuya economía estaba basada en la industria y su población era de más de medio millón de habitantes. La población había crecido tanto gracias a la operación urbanística del siglo XIX por el derribe de las murallas y por la creación de la ciudad nueva y del ensanche, por parte de Ildefons Cerdá, un ingeniero. 

Desde ese momento, Barcelona se expandió, el área central se perfiló como un gran centro burgués. En la Exposición Universal de 1878 se incentivó que se buscase un nuevo lenguaje artístico y de representación humana. Por lo tanto, el modernismo catalán tiene éxito, estando presente en el arquitecto Antoni Gaudí. Desde la Exposición Universal, la relación de Güell y Gaudí empezó cuando el arquitecto mostró el proyecto que había hecho para un comerciante, desde ese momento, Güell comprendió el estilo y sentido de su arquitectura.

El proyecto del Park Güell fue un encargo de Eusebi Güell a Gaudí, en principio era una urbanización lujosa para familias ubicada en la Montaña Pelada, inspirada en los parques residenciales de Gran Bretaña. Pero más tarde esta urbanización privada se convertiría en un parque público por las condiciones de venta que tenían, la exclusividad y la falta de transporte.

En 1969 fue reconocido como monumento de interés cultural y en 1984 declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO.

En el parque podrás visitar la Plaza de la Naturaleza, Paseo de las Palmeras, Casa Larrard, la Escalinata Monumental y el Mirador de la Bajada de la Gloria, entre otros maravillosos lugares y rincones que se encuentran dentro. Además, si no te quieres perder ni un detalle puedes tener una visita guiada donde explicarán la historia, la simbología, etc.

Una zona destacable es los Jardines de Austria, destinado en un principio a las parcelas para hacer la urbanización, se convirtió en un jardín ya que cuando el parque se hizo público, se destinó a un vivero municipal. Austria donó árboles para la realización de una exposición que se llamaba “Viena en Barcelona”. En el jardín se encuentran las dos casas que se construyeron, la de Martí Trias i Domènech y la casa muestra, la actual Casa Museo Gaudí. Puedes ver en primera persona estos Jardines de Austria cuando vengas a estudiar a alguna de las escuelas de español en Barcelona, además de aprender esta lengua. 

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